Ciudad de México.- El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en México en colaboración con la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil: Dirección General de Resiliencia (DGR) de la Ciudad de México, Banco Mundial y la Unión Europea, participaron en el evento inaugural de la capacitación de Evaluación de necesidades post-desastre (PDNA por sus siglas en inglés).

Edgar González, Oficial de programa de ambiente, energía y resiliencia del PNUD en México, mencionó que la gestión integral de riesgos de desastres es una condicionante importante del desarrollo, ya que los desastres echan atrás muchos de los esfuerzos en reducción de las brechas de desigualdad y marginación.  

Agregó que la herramienta PDNA cobra relevancia ante estos contextos al ser una metodología que obedece a la necesidad de articular mejor los esfuerzos alrededor de los planes de evaluación o de recuperación, para no duplicarlos y no dispersarlos.

Esta herramienta fue desarrollada por el Grupo de Desarrollo de las Naciones Unidas (UNDG), el Banco Mundial y la Unión Europea y está diseñada para ayudar a los países afectados por desastres en la evaluación de los efectos socioeconómicos y de desarrollo humano, así como a la posterior planificación de la recuperación.

La capacitación de PDNA, que se llevará a cabo del 24 al 28 de febrero en la Ciudad de México, busca aumentar el número de profesionales capaces de llevar a cabo evaluaciones post-desastres en el terreno, así como crear un equipo de expertos.  

El trabajo específico de este taller está enmarcado en una colaboración que se tiene con financiamiento de la Unión Europea, en el marco del proyecto denominado PDNA Rollout 2 que busca contribuir a nivel regional al fortalecimiento de las capacidades para que los países hagan de manera directa estas evaluaciones con la metodología. 

Sobre la herramienta de evaluación Post-Desastre

En el año 2008 el Grupo de las Naciones Unidas para el Desarrollo (GNUD), la Unión Europea y el Banco Mundial firmaron una declaración conjunta de coordinación ante situaciones de post-crisis. Como resultado de ello surgió la herramienta del PDNA, así como las correspondientes Directrices de Recuperación de Desastres que, con su uso y aplicación, ayudaran a los países a desarrollar un plan de recuperación a largo plazo. Estas herramientas están destinadas a evitar el despliegue de acciones y procesos de recuperación confusos y paralelos, y más bien, unir a los socios y al apoyo internacional bajo un único proceso local.