Fortalecimiento institucional, estrategia de gobernanza efectiva

Las instituciones nos anteceden, nos organizan y nos superan, y su consolidación potencia la gobernanza del Estado

20 de Agosto de 2020

Recientemente, como parte de su estrategia de gestión del conocimiento, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en México concluyó la sistematización de la trayectoria del Programa de Cooperación AMEXCID-PNUD (PROCAP). Los hallazgos encontrados constituyen la base para una colaboración renovada con el gobierno de México y proyectan un ambicioso plan de trabajo que se extiende en el horizonte hasta el año 2024. Las lecciones aprendidas nos demuestran que fortalecer las instituciones refuerza la eficacia de los gobiernos y potencia la gobernanza del Estado.

En 2013, dos años después de la entrada en vigor de la Ley de Cooperación Internacional para el Desarrollo y de la firma del Acuerdo estratégico de colaboración entre el PNUD y el Gobierno de México, se estableció el PROCAP, para fortalecer la institucionalización de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID). Este Acuerdo también se sumó al propósito del PNUD a nivel global de apoyar los esfuerzos de los países emergentes para ampliar sus programas de Cooperación Sur-Sur (CSS). De ahí que, entre el 2010 y el 2015, el PNUD firmó acuerdos similares con Brasil, China, India, Indonesia, Sudáfrica, Rusia y Turquía.

Concebido para fortalecer el esquema de contratación de recursos humanos de la AMEXCID, el PROCAP se ha convertido en un programa que combina la movilización de expertise con un portafolio de proyectos orientados a: desarrollar las capacidades nacionales para la gestión de la Cooperación Internacional para el Desarrollo (CID); fortalecer la política mexicana de CSS; promover alianzas estratégicas para el desarrollo; y apoyar la implementación del Plan de Desarrollo Integral (PDI) del norte de Centroamérica y el sur sureste de México.

Evolución y diversidad de proyectos para cumplir el mandato de la AMEXCID

A lo largo de su historia, el PROCAP ha implementado acciones para responder a problemáticas que van desde la contabilización de los flujos de CSS ofrecidos por México, hasta la vinculación con el sector privado, pasando por el ajuste de los indicadores del marco de monitoreo de la cooperación eficaz al desarrollo a la realidad nacional. Los resultados de estas iniciativas han sido incluidos en el documento de sistematización que, al tiempo que muestra la evolución del programa y la diversidad del portafolio, refleja la capacidad del PNUD para proveer a la AMEXCID de los instrumentos requeridos para cumplir su mandato.

En particular, destacan tres proyectos emblemáticos, pues cumplen con 13 de los 16 criterios que definen las buenas prácticas de CID entre el Sistema de las Naciones Unidas para el Desarrollo y el Gobierno de México. Estos son:

En los tres casos, la sistematización resalta el valor agregado del PNUD como “facilitador, socio y promotor de innovación, con una red de expertos y oficinas a nivel global, así como en los procesos que aseguran transparencia, rendición de cuentas y formalidad en el uso de recursos para el desarrollo.”, según las conclusiones del informe.

Institucionalización de la CID: lecciones aprendidas y contribuciones

Entre las lecciones aprendidas del documento se destaca la necesidad de plantear el fortalecimiento institucional como una acción de largo plazo. También, resalta el carácter crucial de que los procesos tengan apropiación nacional y se internalicen los conflictos inherentes al desarrollo. Por otro lado, enfatiza la importancia de los resultados de los proyectos, no solo los productos. Asimismo, el informe subraya la pertinencia de vincular la contratación del expertise y el portafolio de proyectos, conjugar las capacidades del PNUD y la AMEXCID en favor de la CSS, co-crear e incluir a distintos actores para aumentar el impacto, así como incentivar una retroalimentación productiva.

A seis años de la creación del programa, el PNUD reflexiona sobre su contribución a la institucionalización de la AMEXCID y el ejercicio de sistematización propone algunas respuestas.

La versión actual del PROCAP está alineado a la Agenda 2030 y abona al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 16 Paz, Justicia e Instituciones Sólidas y 17 Alianzas para lograr los objetivos.[1] Además, responde al llamado del Documento Final de Buenos Aires (PABA+40) para mejorar la CSS y Triangular, construyendo capacidades institucionales y humanas, generando aprendizaje y compartiendo mejores prácticas y experiencias en la materia.

Para 2025, consolidar la función implementadora de CID

El Programa Sectorial de Relaciones Exteriores 2019-2024 busca “concretar una cooperación para el desarrollo renovada, enfocada en la instrumentación de programas y proyectos que beneficien directamente a la población de nuestros países socios, así como en el fortalecimiento institucional. En ese sentido, la confianza depositada en el PNUD, a través de la tercera etapa del PROCAP, buscará contribuir al logro de estos objetivos, estrategias y acciones".

Para ello, en la tercera etapa, definida para el período 2019-2025, el PROCAP apoyará los esfuerzos de la AMEXCID para incrementar la eficacia de las políticas de CSS de México. Esto es, buscará contribuir a aumentar las capacidades institucionales de la AMEXCID para fortalecer su función como ente implementador de los esfuerzos nacionales de CID. Para lograrlo, el PNUD impulsará proyectos orientados a hacer más con menos, a aumentar su impacto en beneficio de las poblaciones más vulnerables, además de apoyar la transición de la AMEXCID como una agencia que coordina, hacia una que implementa proyectos en el campo.

El propósito del PNUD es posicionarse como un socio estratégico del Gobierno de México en un panorama de desarrollo complejo y cambiante. Este objetivo está firmemente ligado a su compromiso y mandato de erradicar la pobreza y las desigualdades; de volverse una organización más ágil, innovadora y emprendedora -un referente intelectual que logre asumir y gestionar los riesgos-; y, sin duda, ser más eficiente en el uso de los recursos para obtener resultados.

La colaboración del PNUD con la AMEXCID es una oportunidad para construir sobre lo alcanzado y dar paso a innovaciones que consoliden el Sistema mexicano de CID. Más allá del apoyo a la nueva política mexicana de cooperación, la colaboración busca cimentar instituciones fuertes para consolidar al Estado mexicano. Para lograrlo, se apoyará, en el corto plazo, la reestructuración de la Agencia a fin de escalar la CSS en México, en su calidad de medio de implementación de la Agenda 2030. En el mediano y largo plazos, se contribuirá a reforzar las capacidades del gobierno mexicano para alcanzar sus propios objetivos de desarrollo, como eje central del mandato del PNUD en el país. Es decir, con estas acciones se busca posicionar al fortalecimiento institucional como una estrategia de gobernanza efectiva y hacer realidad el espíritu de la Agenda 2030, sin dejar a nadie atrás.

[1] Específicamente a las metas: 16.6 Crear a todos los niveles instituciones eficaces y transparentes que rindan cuentas; 16.8 Ampliar y fortalecer la participación de los países en desarrollo en las instituciones de gobernanza mundial; 17.6 Mejorar la cooperación regional e internacional Norte-Sur, Sur-Sur y triangular en materia de ciencia, tecnología e innovación y el acceso a estas, y aumentar el intercambio de conocimientos en condiciones mutuamente convenidas, incluso mejorando la coordinación entre los mecanismos existentes, en particular a nivel de las Naciones Unidas, y mediante un mecanismo mundial de facilitación de la tecnología; y 17.9 Aumentar el apoyo internacional para realizar actividades de creación de capacidad eficaces y específicas en los países en desarrollo a fin de respaldar los planes nacionales de implementación de todos los Objetivos de Desarrollo Sostenible, incluso mediante la cooperación Norte-Sur, Sur-Sur y triangular.